Con el fallo emitido por la Comisión de Justicia de la FPF llega a su fin la incertidumbre en la que estuvieron sumidos tanto no sólo hinchas moqueguanos, sino también a la directiva del elenco dorado, quienes ahora no tendrán excuza para elaborar un plan de trabajo inteligente de cara al debut en primera.
El reclamo presentado por José Mallqui, solicitando castigar con la pérdida de 3 puntos al Cobresol para luego disputar un partido en cancha neutral para definir al campeón del torneo, generó más de un dolor de cabeza a los dirigentes moqueguanos especialmente en el plano económico al no poder aún asegurar algunos patrocinadores para la próxima temporada. Incluso CMD habría demorado la entrega del dinero correspondiente al premio por lograr el ascenso.
Asimismo, muchos de los jugadores que lograron el ascenso aún no han definido su situación al interior de la institución a raíz de la demora en la definición de este caso. El campeonato finalizó el pasado 18 de octubre, con lo cual Cobresol contaba de con una "ventaja" en el calendario que de alguna manera le permitiría ir armando con anticipación un equipo competitivo que le permita asegurar su permanencia en la máxima división de nuestro balompié e incluso intenar finalizar en la parte alta de la tabla. Pero por el contrario, los dirigentes tuvieron que concentrar sus esfuerzos en demostrar que habían cumplido con la bolsa de minutos dejando en stand by la renovación de contratos al que igual que los posibles fichajes.
Ahora que el reclamo del Sport Áncash ha sido desestimado por la FPF, la directiva debe librar una lucha contra el tiempo para asegurar por lo menos a 10 de los jugadores que obtuvieron el título para contar con un equipo base que les sirva como punto de partida con respecto a lo que será el Cobresol FBC versión 2011.
Por otro lado, la ADFP-SD tendrá que mejorar la forma de llevar la contabilidad del minutaje y evitar así que al final del torneo se generen suspicacias de este tipo que de alguna forma vienen a empañar otra muy buena temporada en el torneo de ascenso.
Por Giancarlo Córdova
El reclamo presentado por José Mallqui, solicitando castigar con la pérdida de 3 puntos al Cobresol para luego disputar un partido en cancha neutral para definir al campeón del torneo, generó más de un dolor de cabeza a los dirigentes moqueguanos especialmente en el plano económico al no poder aún asegurar algunos patrocinadores para la próxima temporada. Incluso CMD habría demorado la entrega del dinero correspondiente al premio por lograr el ascenso.
Asimismo, muchos de los jugadores que lograron el ascenso aún no han definido su situación al interior de la institución a raíz de la demora en la definición de este caso. El campeonato finalizó el pasado 18 de octubre, con lo cual Cobresol contaba de con una "ventaja" en el calendario que de alguna manera le permitiría ir armando con anticipación un equipo competitivo que le permita asegurar su permanencia en la máxima división de nuestro balompié e incluso intenar finalizar en la parte alta de la tabla. Pero por el contrario, los dirigentes tuvieron que concentrar sus esfuerzos en demostrar que habían cumplido con la bolsa de minutos dejando en stand by la renovación de contratos al que igual que los posibles fichajes.
Ahora que el reclamo del Sport Áncash ha sido desestimado por la FPF, la directiva debe librar una lucha contra el tiempo para asegurar por lo menos a 10 de los jugadores que obtuvieron el título para contar con un equipo base que les sirva como punto de partida con respecto a lo que será el Cobresol FBC versión 2011.
Por otro lado, la ADFP-SD tendrá que mejorar la forma de llevar la contabilidad del minutaje y evitar así que al final del torneo se generen suspicacias de este tipo que de alguna forma vienen a empañar otra muy buena temporada en el torneo de ascenso.
Por Giancarlo Córdova
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